• En el programa también participaron Paul Romero, Presidente de la Asociación de Empresas Familiares del Perú, Mary Ann Gamarra, Gerente Legal de Gambell Group y Pelayo Gonzalez, CFO de DoubleTree by Hilton, quienes compartieron sus experiencias.

Pablo Montalbetti, Decano de la Facultad de Administración y Negocios de la Universidad Tecnológica del Perú, desarrolló el programa "Dirección y Gestión de Empresas Familiares", que estuvo dirigido a empresarios o emprendedores estudiantes y egresados de la UTP, así como a sus familiares.  El objetivo fue fortalecer las capacidades directivas de los propietarios, entender y analizar la importancia de un buen gobierno familiar y corporativo, y gestionar con eficacia y alto performance para crear valor a la empresa. 

En su primera sesión, Pablo expuso algunos conceptos generales como la definición de empresas familiares, sus características y la importancia de implementar un protocolo familiar. Durante el programa, también brindó recomendaciones para desarrollar un plan de acuerdo al negocio.  

“Si no pensamos estratégicamente, será muy difícil que podamos elaborar un planeamiento. El punto de partida para tomar cualquier decisión debe venir de un criterio de racionalidad, es decir, números, porcentajes y datos objetivos; y, posteriormente incluir la intuición. Cuando se realiza al revés, la probabilidad de equivocarse es más grande”, señaló.

Durante la última sesión, compartió aprendizajes con un panel conformado por Paul Romero, Presidente de la Asociación de Empresas Familiares del Perú, Mary Ann Gamarra, Gerente Legal de Gambell Group y Pelayo Gonzalez, CFO de DoubleTree by Hilton.  

Para Mary Ann, colaborar en otras organizaciones fue una experiencia positiva. “Definitivamente, recomiendo trabajar en otros espacios laborales antes de asumir un rol dentro de la propia empresa, porque no te sesgas y terminas viendo buenas prácticas de otros lugares que luego puedes aplicar”, mencionó. 

Siguiendo con el tema, Pelayo resaltó que es una buena opción contar con un externo para liderar una empresa familiar. “No hay que tener miedo a que una persona de afuera sea quien dirija la empresa. No siempre un familiar cuenta con las habilidades. En ese caso, es mejor contar con una persona que esté preparada”, sostuvo. 

Por su parte, Paul compartió las ventajas de tener un presupuesto destinado a la inversión. “Dejar algo de los dividendos, en la medida de las posibilidades, ayuda a salvaguardar el bienestar de la empresa, por ejemplo, con un mayor número de inmuebles y proyectos. Caso contrario, sería más complicado conseguir un crecimiento en momentos hostiles”, señaló. 

Al cierre de la sesión, los expertos compartieron algunas recomendaciones generales como mantener la capacidad emprendedora de las primeras generaciones, tomar en cuenta que un protocolo debe ser elaborado a la medida de la familia, considerar la implementación de una junta de gobierno para tomar decisiones rápidas, desarrollar la prudencia financiera, entre otras.